BUENOS AIRES.- El gobierno argentino demandó a la Unión Europea ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) por las restricciones que impone al biodiesel argentino, informó ayer la Cancillería en Buenos Aires. Tras lograr en 2012 la revisión de una medida en ese sentido impuesta por España, Argentina recurrió al mecanismo de solución de diferencias de la OMC para cuestionar esta vez a la Comisión Europea y a estados miembro de la Unión Europea, como es el caso de Bélgica, Francia, Italia y Polonia.
Buenos Aires demanda que se respete la normativa internacional para que estén garantizadas las condiciones de acceso del biodiesel argentino al mercado europeo en igualdad de condiciones con otros proveedores.
Según señala la Cancillería, "las normas europeas afectan la comercialización del biodiesel argentino en la UE al aplicarle un trato menos favorable respecto del proveniente de otros orígenes, en particular al producido en países de la Unión Europea". Se cuestionan asimismo ciertas medidas que representan subsidios al biodiesel de origen comunitario y que afectan las condiciones de comercialización del combustible argentino.
Estas restricciones son "obstáculos que dificultan un clima de diálogo constructivo en el marco de las negociaciones comerciales bilaterales y regionales", advirtió la Cancillería argentina.
Las exportaciones de biodiesel en 2012 representaron el 14% de las exportaciones argentinas a la Unión Europea. El gobierno argentino resolvió el año pasado una controversia comercial por el biodiésel con España, principal destino de este producto argentino, por el cual también había reclamado ante la OMC. (DPA)